Éste es el testimonio del Padre Pío:
“Un día, mientras yo estaba oyendo las confesiones, un hombre vino al confesionario dónde yo estaba. Él era alto, guapo, me vistió con algo de refinamiento y era amable y cortés. Comenzó a confesar sus pecados; los cuales, eran de cada tipo: contra Dios, contra el hombre y contra las morales. ¡Todos los pecados eran molestos! Yo estaba desorientado, por todos los pecados que él me dijo, yo respondí.
Yo le traje la Palabra de Dios, el ejemplo de la Iglesia, las morales de los Santos, pero el penitente enigmático se opuso a mi palabras justificando, con habilidad extrema y cortesía, todo tipo de pecado.
Él vació todas las acciones pecadoras y él intentó hacer normal, natural, y humanamente comprensible todas sus acciones pecadoras. Y esto no solamente para los pecados que eran repugnante contra Dios, Nuestra Señora, y los Santos, él fué Rotundo sobre la argumentación, pero, que pecados morales tan sucios y ásperos. Las respuestas que él me dio con la delgadez experimentada y malicia me sorprendieron.
Yo me pregunté: ¿quién es él? ¿De qué mundo viene él? Y yo intenté mirarlo
bien, leer algo en su cara. Al mismo tiempo concentré mis oídos a cada palabra,
para darle el juicio correcto que merecían. Pero de repente; a través de
una luz vívida, radiante e interior yo reconocí claramente quién era él.
Con autoridad divina yo le dije: diga…….”Viva Jesús por siempre” “Viva
María eternamente” En cuanto yo pronuncié estos nombres dulces y poderosos, Satanás desapareció al instante en un goteo de fuego, mientras dejaba un hedor insoportable".
3 comentarios:
hola me da mucho gusto entrar a esta pagina y encontrarme con articulos tan intersantes sobre mi fe! este en general me llamo la atención, ya habia escuchado esta historia pero no sabia bien la verdadera fuente!
El mundo cree que el mal no tiene cuerpo ni existencia, y si creemos en eso nos dejamos vencer por el mal! asi que seamos concientes! y valientes para vencerlo!
Cinthia
Hola, La ciencia no puede explicar muchas cosas, en todo caso contamos con la proteccion del Señor, nuestra fe es un arma increible y tenerle como Padre, hermono y consolador siempre sera un gran regalo.
Javy Augusto M.B.
Definitivamente el demonio es muy osado al desafiar y tentar a los hombres en santidad.
Invito a todos a intensificar y perseverar en la Oración y penitencia por el Santo Padre y toda la Iglesia.
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