"Tú no tienes por qué abortar si no quieres, pero no tienes derecho a imponer tus principios morales a los demás. Si lo intentas, eres un enemigo de la libertad, antidemócrata y nazi".
Esta frase, con más o menos variantes, la estamos escuchando todos los días en cuanto nos atrevemos a decir que el aborto es un crimen abominable. No importa que esgrimamos los datos científicos que demuestran que el ser humano empieza a existir desde la concepción.
Siempre encuentran algún "científico" que es capaz de decir aquello que quiere oír quien le paga, los que negocian con la matanza de los inocentes. Por eso, la discusión en torno al aborto siempre termina con la frase antes citada, que es la aplicación del relativismo a un caso concreto.
Tenía razón Rouco cuando afirmó, en la inauguración de la Plenaria del Episcopado, que "sin una base moral objetiva ni siquiera la democracia puede asegurar una paz estable".
Cuando el relativismo se impone y se llega incluso a convertir en dictadura –es decir, cuando ya no te permiten ni expresar tus opiniones en contra de algo que está legislado–, entonces la democracia se convierte –son palabras también de Rouco– en un "mecanismo empírico", en algo meramente formal.
Por eso, aunque no se lo crean los que nos denigran, cuando estamos defendiendo la vida del no nacido estamos a la vez defendiendo la verdadera democracia.
El tiempo nos dará la razón, aunque, por desgracia, para ello hayan tenido que morir millones de inocentes.
Santiago Martín, sacerdote
3 comentarios:
El relativismo, al final, se convierte en lo absoluto y en la nueva "norma" que todos debemos de seguir. Qué paradójico.
Y dale, y dale, y dale... ¿No os cansáis de seguir fastidiando con el rollo del aborto? Dejad a la gente en paz y que cada uno haga lo que quiera sin tener que sentirse reprimido por gente como ustedes.
El aclarar hechos, es para nosotros importante. Las personas deben de ser informadas en todo momento de cuales son los hechos y cuales son las consecuencias de realizarlos. ¿De que otra manera podrian ser libres?
La ignorancia Señor Takumi no es liberadora. A esto se le suma el hecho que utilizamos los mismos medios,de quienes estan a favor de la misma, para plantear nuestra posición la cual creemos verdadera.
Con este ejercicio de libertad no se reprime a nadie.
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